Las ayudas para el trabajo son herramientas que proporcionan a los empleados información u orientación sobre cómo realizar una tarea específica. Pueden consistir en instrucciones escritas, diagramas, gráficos o cualquier otro tipo de ayuda visual. Una de las ventajas de utilizar ayudas para el trabajo es que pueden contribuir a mejorar la productividad de los empleados al proporcionarles un acceso rápido y fácil a la información que necesitan para realizar sus tareas. Además, pueden ayudar a reducir los costes de formación al proporcionar a los empleados una herramienta de aprendizaje a su propio ritmo que pueden utilizar cuando les convenga. A la hora de seleccionar una ayuda para el puesto de trabajo, es importante tener en cuenta las necesidades del empleado y la tarea que va a realizar. La ayuda en el trabajo debe diseñarse de forma que sea fácil de entender y utilizar para el empleado. Además, debe ser duradera y capaz de resistir un uso repetido. Al crear una ayuda para el puesto de trabajo, hay que mantener siempre la sencillez. Debe ser fácil de entender y utilizar. Evite utilizar jerga