Las fuerzas del orden utilizan carteles de "se busca" en blanco y negro para capturar a los menores fugados. Estos carteles contienen detalles esenciales como el nombre, la edad, la altura, el peso y las características físicas del preso fugado. Los agentes utilizan estos carteles para difundirlos en las inmediaciones y ayudar a las fuerzas del orden a capturar al delincuente lo antes posible. Las imágenes también se comparten en plataformas de redes sociales, medios de comunicación y boletines públicos para alertar a la población de la fuga y solicitar su ayuda en caso necesario. El objetivo último de estos carteles es capturar al delincuente para evitar que cometa más delitos o cause daños a personas inocentes.